Con el comienzo del invierno el próximo 20 de junio, comunidades de departamentos y edificios enfrentan un alza de hasta un 30 % en sus gastos comunes debido al mayor consumo de calefacción, agua caliente y electricidad. Te contamos en qué comunas impactará más y qué medidas tomar ahora para amortiguar el golpe.
Por Redacción Economía
El invierno aún no comienza oficialmente, pero en muchas comunidades ya se siente: el encendido de calderas, el mayor uso de calefacción eléctrica y el alza en las tarifas están comenzando a impactar en los gastos comunes. De acuerdo con cifras de la plataforma Comunidad Feliz, los valores podrían aumentar entre un 20 % y 30 % durante los meses más fríos del año.
En términos prácticos, esto podría significar entre $5.000 y $10.000 adicionales al mes por departamento, dependiendo del tamaño del edificio, su sistema de calefacción y la comuna en que se ubica.
El año pasado, durante el invierno, los gastos comunes promedio en la Región Metropolitana subieron un 12,45 %, pasando de $116.905 a $130.405. Algunas comunas, sin embargo, vieron alzas mucho mayores: en La Reina, por ejemplo, el aumento fue del 26,6 %; en Huechuraba, del 23,1 %; en Puente Alto, del 16,6 %; y en Macul, del 16,5 %.
Desde Comunidad Feliz explican que hay varios factores detrás de estas alzas. En primer lugar, el uso intensivo de agua caliente y calefacción en espacios comunes, como calderas centrales, genera un aumento automático en los costos. A esto se suma la reciente actualización de las tarifas eléctricas, tras el descongelamiento que rigió por varios años, y el alza en los gastos de personal administrativo, seguridad y aseo, debido a los ajustes del salario mínimo y la reducción de jornada laboral.
“Vemos un aumento sostenido en los costos operativos de las comunidades, que se acentúa en invierno por el consumo energético. Es fundamental que los comités de administración planifiquen con anticipación y tomen medidas de eficiencia”, explicó Sebastián Pavez, vocero de la plataforma.
Entre las recomendaciones más repetidas por los expertos está el aislamiento térmico de áreas comunes, la modernización de instalaciones para reducir el consumo energético, y la implementación de soluciones digitales que permiten automatizar procesos y ahorrar en personal. Algunas comunidades han optado incluso por sistemas de conserjería remota, lo que puede representar un ahorro de entre un 10 y un 15 % mensual.
La recomendación general para los vecinos y comités es anticiparse. Reuniones extraordinarias para revisar presupuestos, evaluar licitaciones de servicios como mantención, seguridad y aseo, y educar a los residentes sobre el uso responsable de calefacción y energía son pasos clave para evitar sorpresas mayores en los próximos meses.
El invierno comienza oficialmente el 20 de junio, pero los efectos en las cuentas ya están en marcha. En un año marcado por la inflación contenida pero persistente, todo aumento pesa. Y en este caso, el frío no solo se sentirá en el cuerpo, sino también en el bolsillo.
