En una movida sorprendente, el presidente Trump decidió despedir al general Charles Q. Brown Jr., marcando un quiebre en la tradición militar. Brown, conocido como C.Q., es solo el segundo afroamericano en ocupar el cargo de presidente de los Jefes del Estado Mayor Conjunto. Este despido, parte de una inesperada purga en el Pentágono, ha sumido a la política en la selección de líderes militares.
Entre los despedidos están figuras importantes como la almirante Lisa Franchetti, la primera mujer en liderar la Armada, y el general James Slife, vicepresidente de la Fuerza Aérea. Según Trump, esta decisión surge de su percepción de que el liderazgo militar está ‘demasiado centrado en la diversidad’ y desconectado de la defensa del país. Esta sacudida plantea interrogantes sobre el futuro del mando militar estadounidense en tiempos de cambio.