El excandidato presidencial del PRO, Marco Enríquez-Ominami, ha hecho un análisis mordaz sobre la situación actual del Gobierno y la oposición, a solo meses de las cruciales elecciones de noviembre. Durante una conversación en Radio Biobío, ME-O no escatimó en críticas hacia la administración actual y sus promesas incumplidas.
Enríquez-Ominami subraya que el Ejecutivo ha dejado de lado consignas vitales, tales como el fin de las AFP y las isapres, así como la esperada reforma tributaria. En su opinión, el gobierno ha desertado de las banderas de cambio que le dieron impulso en su llegada al poder, lo que ha generado un despego con la ciudadanía.
“Ninguna encuesta muestra hoy día que el país reelegiría a un líder del gobierno”, afirmó, sugiriendo que el apoyo que una vez recibió la administración ha desaparecido, dejando claro que es necesario ampliar la base de apoyo. Propuso la posibilidad de inscribirse en primarias que incluyan a todos, desde la Democracia Cristiana hasta el Partido Comunista, para ofrecer una opción real de cambio.
El excandidato también reflexionó sobre el liderazgo de ciertos candidatos de derecha en las encuestas, atribuyéndolo a un creciente descontento con la actual gestión. Sin embargo, no hesitó en clasificar este Gobierno como “infinitamente mejor intencionado” que el de Sebastián Piñera, aunque reiteró que debería retomar su compromiso con las reformas profundas que tanta falta hacen al país.
A pesar de los retos, Enríquez-Ominami destacó que aún existe un espacio considerable para llevar a cabo reformas esenciales antes de que culmine el mandato, incluyendo la calidad de la educación pública y la reducción de listas de espera, aspectos que siguen siendo de suma importancia para la población.